La gira, que iniciará en junio, no solo atraerá a miles de fanáticos, sino que también estimulará diversos sectores de la economía británica.
El informe de Barclays, denominado Swiftonomics, estima que los asistentes a los conciertos gastarán en promedio 921 dólares para ver a la famosa cantante. Este gasto incluye 223 dólares en boletos de concierto, 131 dólares en alojamiento, 120 dólares en transporte y 60 dólares en ropa específica para el evento.
Además, se espera que cada fan gaste alrededor de 85 dólares en productos oficiales de merchandising, 64 dólares en comidas previas al concierto y 234 dólares en otros costos como bebidas y discos de vinilo. Comparado con el gasto promedio en una salida nocturna en el Reino Unido, que ascendería a 72 dólares, y los 432 dólares gastados en una boda, estos números subrayan el impresionante impacto económico que tendrá la gira.
Los beneficios para la economía local
El Eras Tour recorrerá cuatro estadios británicos a lo largo de 15 noches, atrayendo a cerca de 1,2 millones de fanáticos. Este volumen de gasto no solo beneficiará a la industria del entretenimiento, sino que también impulsará sectores como el de la hotelería, el transporte y el comercio minorista.
El análisis de Barclays argumenta que los eventos de grandes estrellas como la intérprete de Cruel Summer pueden servir como importantes motores económicos, no solo por la venta de entradas y productos relacionados, sino también por el estímulo indirecto a otros servicios y bienes.